¿Qué quiere decir el Aquinate cuando habla de «estado de perfección», o más ampliamente, qué entiende la Iglesia Católica por «estado de perfección»? A menudo utiliza esta frase en obras como Suma Teológica, Sobre la perfección de la vida espiritual etc.
- Véase también el discurso del Papa Pío XII 11 de diciembre de 1957 Sous le eternelle sobre el estado de perfección. – > Por Geremia.
- (Aquí hay una versión corregida.) – > Por Geremia.
Refiriéndose a la obra de Santo Tomás de Aquino De perfectione vitæ spiritualis c. 15el P. Royo Marín, O.P., en La vida religiosa p. 116define el «estado de perfección» en general:
Los estados de perfección cristiana son aquellos cuyos miembros se obligan de manera permanente y estable, a través de determinados medios*, a adquirir la perfección cristiana o a ejercitarla en bien de los demás.
Son aquellos estados de vida cristiana cuyos miembros se obligan de una manera permanente y estable, mediante determinados medios, a adquirir la perfección cristiana o a ejercitarla en bien de los demás.
*como una regla aprobada por la Iglesia, como Regla de San Benito o Regla de San Agustín
Así, el «estado de perfección» puede dividirse en el de
- adquisición de la perfección
- La vida religiosacuyo objeto principal es Dios.
cf. Suma Teológica II-II q. 186 a. 1 «¿Si la religión implica un estado de perfección?»
- La vida religiosacuyo objeto principal es Dios.
- Ejercer la perfección por el bien de los demás
- Estado episcopalcuyo objeto es el bien de los demás por amor a Dios.
Los artículos de Santo Tomás sobre la cuestión del estado de perfección en general (Suma Teológica II-II q. 184) merecen ser leídos. Son relevantes aquí los artículos
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1. ¿Si la perfección de la vida cristiana consiste principalmente en la caridad?
Se dice que una cosa es perfecta en la medida en que alcanza su fin propio, que es su última perfección. Ahora bien, la caridad es la que nos une a Dios, que es el fin último del espíritu humano, ya que «el que permanece en la caridad, permanece en Dios, y Dios en él» (1 Jn. 4:16). Por tanto, la perfección de la vida cristiana consiste radicalmente en la caridad.
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4. ¿Si quien es perfecto está en estado de perfección?
propiamente dicho, se dice que uno está en estado de perfección, no por tener el acto de amor perfecto, sino por obligarse a perpetuidad y con cierta solemnidad a las cosas que pertenecen a la perfección.
cf. II-II q. 186 a. 1 ad 3: «no se sigue que quien está en estado de perfección sea ya perfecto, sino que tiende a la perfección». Incluso a los que luchan por mantener los 10 mandamientos se les permite entrar en la religión, porque «el estado religioso es una escuela espiritual para la consecución de la perfección de la caridad», «realizada mediante la eliminación de los obstáculos a la caridad perfecta por las observancias religiosas» (II-II q. 189 a. 1 co.).
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7. ¿Si el estado religioso es más perfecto que el de los prelados [obispos]?
Como dice Agustín (Gen. ad lit. xii, 16), «el agente es siempre más excelente que el paciente». Ahora bien, en el género de la perfección según Dionisio (Eccl. Hier. v, vi), los obispos están en la posición de «perfeccionadores», mientras que los religiosos están en la posición de ser «perfeccionados»; lo primero pertenece a la acción, y lo segundo a la pasión. De ahí que sea evidente que el estado de perfección es más excelente en los obispos que en los religiosos.
Es por la abundancia de su amor a Dios que los obispos son capaces de amar a su rebaño. Por eso Jesús preguntó primero a San Pedro si le amaba y luego le mandó apacentar su rebaño (Juan 21:15-17).
cf. La definición del P. Hardon, S.J. de «estado de perfección» como
Aquellas formas de vida estables en las que algunos fieles se obligan mediante votos, o promesas equivalentes a votos, a practicar los consejos evangélicos de pobreza, castidad y obediencia. Se llaman estados de perfección porque los que viven en estos estados se comprometen a seguir una regla de vida particular, aprobada por la Iglesia, cuya fiel observancia conduce ciertamente a la perfección cristiana.