La Iglesia SUD es quizás única en la idea de que la instrucción y el cambio dentro de la Iglesia no es simplemente automático – que los líderes de la Iglesia no pueden simplemente hacer lo que quieren. Esta doctrina se encarna en la Ley de Consentimiento Común de la Iglesia SUD.
¿Qué es la Ley del Consentimiento Común, incluyendo la base bíblica y las enseñanzas oficiales de la Iglesia, y por qué es importante?
La Ley del Consentimiento Común] es que en el reino terrenal de Dios, el Rey aconseja lo que debe hacerse, pero luego permite que sus súbditos acepten o rechacen sus propuestas. A menos que el principio del libre albedrío sea operado en la rectitud, los hombres no progresan hacia la salvación final en el reino celestial del más allá. En consecuencia, los funcionarios de la iglesia son seleccionados por el espíritu de revelación en aquellos designados para elegirlos, pero antes de que los funcionarios puedan servir en sus cargos, deben recibir un voto formal de sostenimiento del pueblo sobre el que van a presidir.1
Base bíblica:
- Doctrina & Convenios 20:65-Los ordenados necesitan el voto de la iglesia
- Doctrina y Convenios 26:2-probable primer uso de ‘consentimiento común’
- Éxodo 24:3-la gente está de acuerdo en hacer lo que Moisés les dice que es de Dios
- Números 27:19-Josué colocado ante el sacerdote y la congregación
- Hechos 15:25-Hombres elegidos enviados con Pablo y Bernabé
- Mosíah 29:26– Ahora bien, no es común que la voz del pueblo desee algo contrario a lo que es correcto
- Alma 29:4-Dios nos conceda nuestros deseos, buenos o malos
Elder Loren C. Dunn explicó las responsabilidades que acompañan el proceso de sostenimiento (esto responde a por qué es importante):
Cuando sostenemos a los oficiales, se nos da la oportunidad de sostener a aquellos que el Señor ya ha llamado por revelación. … El Señor, entonces, nos da la oportunidad de sostener la acción de un llamado divino y en efecto expresarnos si por alguna razón podemos sentir lo contrario. Sostener es hacer que la acción nos obligue a sostener a las personas que hemos sostenido. Cuando una persona pasa por el acto sagrado de levantar el brazo a la plaza, debe recordar, con sobriedad, lo que ha hecho y comenzar a actuar en armonía con su voto de sostenimiento tanto en público como en privado
Otro buen artículo sobre este tema es La Ley del Consentimiento Comúnpor Matthew O. Richardson. Aunque no sea doctrina oficial SUD, está bien escrito con varias citas de las escrituras, los profetas y la historia de esta práctica.